Fuego Salvaje es una invitación a mirarnos en el espejo de lo patético y a aceptar que no somos ni tan guapos, ni tan flacos, ni tan gordos, ni tan inteligentes, ni tan normales.
Todo lo que uno pueda imaginar que va a suceder en Fuego Salvaje, no va a suceder: este show rompe con todas las expectativas posibles. No es un espectáculo peligroso, sino brutalmente revelador, cruel y amoroso.
Wilbur nos muestra su cara oculta de la Luna, se desnuda interior y literalmente en escena para lanzar una pregunta arriesgada y comprometida: ¿Sabes quién eres? ¿Quién es la voz que habla a través de ti?